Darío Lecman, máximo levantador de pesas de la historia en Argentina e integrante de las delegaciones de atletas que viajaron a los Juegos Olímpicos de Sydney 2000 y Atenas 2004, expresó, mientras se disputaban los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, su intolerancia respecto a las vicisitudes que deben sobrellevar los deportistas amateurs argentinos, haciendo énfasis en el caso de Georgina Bardach (medalla de bronce en natación en los últimos Juegos Olímpicos) en el que el Comité Olímpico Argentino se negó a pagarle una beca.
Pese a que Bardach se consagró en Atenas, Lecman no entiende la situación en la que se encuentra la nadadora: “Las becas que reciben los deportistas amateurs tendrían que ser sueldos, y más si se trata de Georgina Bardach, porque es una acto heroico haber llegado a donde llegó. Lo que hicieron con ella es un papelón”. “Cuando el deporte no es profesional, nosotros hacemos lo que podemos”, afirmó Lecman.
“Nunca llegué a los juegos en un momento óptimo”, explicó Lecman, que estuvo a días de viajar a Atlanta 1996, pero una lesión en el isquiotibial le impidió la participación. A Sydney 2000 fue para realizar una “presencia simbólica” ya que por la inflamación de una muñeca no compitió. Y no pudo aprovechar su última oportunidad en Atenas 2004 porque cuando se encontraba en plena competencia debió volver a Buenos Aires por un problema familiar, que luego de resolverlo, le permitió regresar a Atenas para finalizar en la posición 17º, lejos de sus pretensiones. Actualmente, Lecman se encuentra retirado de la actividad, después de haber perdido la oportunidad de clasificar a Beijing 2008 por padecer otra lesión.
Pese a que Bardach se consagró en Atenas, Lecman no entiende la situación en la que se encuentra la nadadora: “Las becas que reciben los deportistas amateurs tendrían que ser sueldos, y más si se trata de Georgina Bardach, porque es una acto heroico haber llegado a donde llegó. Lo que hicieron con ella es un papelón”. “Cuando el deporte no es profesional, nosotros hacemos lo que podemos”, afirmó Lecman.
“Nunca llegué a los juegos en un momento óptimo”, explicó Lecman, que estuvo a días de viajar a Atlanta 1996, pero una lesión en el isquiotibial le impidió la participación. A Sydney 2000 fue para realizar una “presencia simbólica” ya que por la inflamación de una muñeca no compitió. Y no pudo aprovechar su última oportunidad en Atenas 2004 porque cuando se encontraba en plena competencia debió volver a Buenos Aires por un problema familiar, que luego de resolverlo, le permitió regresar a Atenas para finalizar en la posición 17º, lejos de sus pretensiones. Actualmente, Lecman se encuentra retirado de la actividad, después de haber perdido la oportunidad de clasificar a Beijing 2008 por padecer otra lesión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario